EL OTOÑO DEL PATRIARCA
Advertencia: para los que no han leído la novela, habrá destripes.
Para continuar con el Mes Colombiano, lo haré con la más complicada de las novelas de Gabriel García Márquez, una novela que requiere mucha habilidad y paciencia para comprenderla. Por el título, ya sabrán cuál es: El otoño del patriarca, publicada en 1975, por lo que este año se cumplen los 45 años de su aparición.
El otoño del patriarca trata sobre Zacarías, el dictador de país
suramericano que ha tenido una vida larga, durante la cual ha gobernado el país
con puño de hierro. La novela consta de solo seis capítulos; sin embargo, sus capítulos son tan largos, con
oraciones tan largas que básicamente forman un solo párrafo que a su vez es un
solo capítulo. Además, hay varias voces internas, que pueden pasar de ser un
narrador cero, uno interno o uno externo. Por esta razón, esta novela es una de
las más difíciles de entender.
Zacarías, cuyo nombre solamente es mencionado una vez en la novela
mientras que siempre es llamado general o patriarca, es el dictador de un país
sudamericano en el Caribe. Es hijo de Bendición Alvarado, una mujer que pintaba
pájaros para vivir, y de padre desconocido. Desde bebé se predijo que sería
alguien muy importante al no poseer líneas en su mano. Debido a su bajo nivel
socioeconómico, cuando subió al poder no sabía leer ni escribir, algo que le
enseñaría Leticia Nazareno siendo él ya un anciano, pero supo mantener su poder
mediante su capacidad para infundir el terror y ser una figura benevolente para
su pueblo.
El patriarca subió al poder a manos de los británicos, pero se
mantuvo en él durante mucho tiempo gracias a los estadounidenses, además de
imponer un régimen opresivo que atacaban y mataba a todo aquel que se le
opusiera o fuera una amenaza para él, y un desmesurado culto a la personalidad
dedicado a él y a su progenitora, algo que lo enfrentó con la Iglesia Católica, con la cual rompió relaciones y expulsó a casi todos sus clérigos. Esto significó
que el general se mantuvo en su cargo mediante el terror pero al mismo tiempo
su pueblo lo veía como un ser magnifico, casi como un dios. También gozó de una
gran disposición de mujeres y tuvo una gran cantidad de hijos; sin embargo,
solo tuvo un hijo legítimo.
Durante el tiempo que duró su dictadura, el patriarca tuvo una gran
cantidad de generales que abusaron de su cercanía con el general para
enriquecerse e intentar equiparar la misma popularidad que tiene el general.
Debido a esto, varios de ellos tuvieron finales atroces pero algunos de ellos
recibieron funerales militares para hacer ver que murieron en el deber.
Bendición Alvarado fue la madre del patriarca y era pintora de
pájaros. A pesar de que siempre vivió en la más absoluta pobreza, fue una de
las mujeres más ricas de su país porque su hijo siempre registró cuentas
bancarias y empresas a nombre de ella, algo que al parecer ella nunca supo
porque muchas de ellas fueron realizadas después de su muerte. Cuando falleció
y como se puede esperar de un régimen donde prima el culto a la personalidad,
su hijo la declaró santa patrona de la nación, curadora de enfermos y maestra
de los pájaros, siendo su fecha de nacimiento fiesta nacional.
Leticia Nazareno es la mujer más importante en la vida del
patriarca, luego de su madre, al ser su esposa. Desde el primer momento en que
la vio, quiso estar con ella, pero ella era novicia de un convento en Jamaica. Cuando
él decretó la expulsión a todos los religiosos del país, la sacó del convento para
que viviera con él, pues ya había decidido que sería su compañera sentimental.
Al principio, Leticia se resistió pero conforme pasó el tiempo asumió su nueva
vida, al punto de ser una figura muy influyente para el patriarca, al enseñar a
leer y a escribir, al enseñarle buenos modales y al darle a su único hijo legítimo,
Emanuel. También empezó a tener influencia en la dictadura, haciendo que el
patriarca derogara varias leyes. Las cosas no acabarían bien para ella.
Es evidente que García Márquez se inspiró en muchos dictadores
hispanoamericanos del siglo XX para recrear al patriarca ya que este presenta
todos los signos de una dictadura: represión, censura y culto a la
personalidad. En este caso, el general es mostrado como un ser legendario, más
parecido al Gran Hermano de 1984 o al Protector de Nosotros, aunque a
diferencia de estos dos la existencia del patriarca es indiscutible y sí
aparece en la historia. Aparece cuando su presencia se requiere y casi siempre
para tranquilizar al pueblo, pero en el momento en el pueblo no lo ve, vemos la
vida de dictador que tiene, la soledad y la angustia que le generan su posición
y que se acrecientan a medida que el patriarca envejece.
Algo que noté de El otoño del patriarca es el culto hacia su madre
que este promueve. A pesar de que esta novela se escribió entre 1968 y 1975, se
anticiparía por quince años al gobierno del turcomano Saparmyrat
Nyýazow, que impuso un régimen completamente
autocrático y lleno de excentricidades, entre las que se destacaba el
renombramiento del mes de abril y del pan (al declarar ilegal el nombre de este
alimento) con el nombre de su madre.
En resumen, El otoño del patriarca es un auténtico retrato sobre cualquier dictador al mostrar todas las características en el patriarca, Zacarías, como abuso de poder, represión, persecución a grupos opositores, culto a la personalidad, etc. Sin embargo, su estilo en el que sus seis capítulos tienen cada uno un solo párrafo, las distintas voces narradoras y el hecho de que cada capítulo pareciera un poema dialogado en verso, la hacen la novela más compleja de Gabriel García Márquez que yo he leído. Por eso, recomiendo leerla cuando ya se ha leído gran parte de la bibliografía.
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