EL CASCANUECES Y EL REY RATÓN

Para realizar la entrada navideña, esta semana analizaré la novela corta El cascanueces y el Rey Ratón de E. T. A. Hoffmann, que es la base para muchas adaptaciones entre ellas el ballet de Tchaikovsky. Fue publicada en 1816.

El cascanueces trata sobre una niña llamada Marie que se entusiasma mucho con un cascanueces que recibe de regalo y descubre algo maravilloso con él. La historia se desarrolla en una ciudad alemana a principios del siglo XIX. Aunque se hacen menciones a Nuremberg, en realidad no sabe en que ciudad se desarrolla la novela.

Los personajes que más sobresalen son Marie Stahlbaum, su padrino Drosselmeier y el Cascanueces.

Marie Stahlbaum es la hija de un consejero médico y es la típica niña de siete años: soñadora y con una gran imaginación. Representa el perfecto contraste entre su hermana Luise, que ya es adolescente, y su hermano Fritz, que está obsesionado con lo todo lo militar. Cuando reciben de regalo un cascanueces, ella se encariña mucho con él al punto de protegerlo después de que Fritz le daña la boca al introducirle nueces grandes y duras. Pero pronto empieza a ser atacada por ratas todas las noches, al igual que a su cascanueces, y después de escuchar una historia, ella empieza a asociar la historia con las ratas y el cascanueces, con los cuales vive varias aventuras.

Drosselmeier es un consejero jurídico superior y el padrino de Marie. Al ser su padrino, es el que les regala el cascanueces a los hermanos Stahlbaum y el que le cuenta a Marie la historia que ella asocia a su cascanueces. Se preocupa por su ahijada, pero como cualquier adulto considera que la imaginación de Marie debería tener un límite y no cree en las historias que la niña cuenta.

El cascanueces es un juguete que en la noche cobra vida y tiene como misión matar el Rey Ratón de siete cabezas para poder recuperar su forma humana que le fue arrebatada por la Reina Ratonilda, madre del Rey Ratón, por venganza. Su verdadera identidad se revela en la novela pero dejaré que ustedes mismos la lean para que puedan saberlo.

El cascanueces y el rey ratón muestra un punto de vista al ver la interacción con Marie con su cascanueces que hace pensar si las aventuras que viven son algo real o un sueño de Marie debido a la narración descriptiva que Hoffmann hace de ellas y por los giros que la historia. También es agradable el giro final que nos deja pensando si lo que vivió Marie durante esa Navidad ocurrió en realidad o sólo es algo producto de su imaginación, como aseguran su padrino y su familia.

Mi problema con El cascanueces y el rey ratón es que a veces deja cabos sueltos que no son resueltos de inmediato sino más adelante de manera fácil y forzada. Si no fuera por eso, la historia sería un gran clásico navideño. Para mí, la historia no está mal como para leerla a nuestros hijos en Navidad, pero lo de los huecos argumentales que se solucionan como si nada es molesto. No estoy segura de recomendarla.