LOS ÁRBOLES MUEREN DE PIE


Esta semana quiero presentar de entrada Los árboles mueren de pie del dramaturgo español Alejandro Casona, seudónimo de Alejandro Rodríguez Álvarez. Esta obra, estrenada en 1949, es muy interesante y trata sobre la felicidad, la mentira y la verdad.
En Los árboles mueren de pie el argumento gira en torno a una organización que se encarga de llevar felicidad a los que no la tienen. El director de dicha institución es un hombre joven que en la obra se le llama Mauricio (su verdadero nombre nunca es mencionado), que decide tomar como misión fingir ser el nieto de una mujer anciana a quien su esposo, el señor Fernando Balboa, le ha mentido desde su expulsión del hogar por su mal comportamiento. Para ello no sólo cuenta con el consentimiento del señor Balboa sino también que decide usar a una joven llamada Marta y conocida en la obra como Isabel, para que ella finja ser su esposa.
El director/Mauricio es un hombre joven, que a pesar de su juventud, se ha convertido en el director de la institución. En verdad ama su trabajo y está dispuesto a recurrir a toda clase de trucos para traer un poco de felicidad a las personas que lo necesitan como unos niños o personas que sufren de tristeza o de depresión. Después de ver la situación tan grave en la que estaba Isabel la invita a su institución para obtener como él mismo lo dice: un alivio para su alma e incluso le pide que finja que es su esposa para una señora anciana.
Marta/Isabel también es joven, pero a diferencia de Mauricio, acaba de pasar por su situación muy seria en la que ha perdido su trabajo y probablemente un techo donde vivir, llegando incluso a pensar en el suicidio. Cuando está por tomar la sustancia con la que va a quitarse la vida, aparece un ramo de rosas con la dirección de la institución y que si quería un cambio en su vida podía asistir allí. Tras encontrarse por primera vez con el señor Balboa y después de una confusión, Mauricio se presenta ante ellos, les dice por qué están allí y les habla sobre la institución. Ella acepta la misión de Mauricio a pesar de no gustarle la idea porque eso implica mentirle a una señora de edad.
El señor Fernando Balboa es un anciano que se ve obligado a mentirle a su esposa sobre el destino de su nieto, al cual se vio obligado a echar de su hogar a causa de su comportamiento. Como sabe que el nieto fue a parar a Canadá, Balboa le inventa que estudió arquitectura, que viajó por todo Canadá y que incluso se casó, todo ello mediante cartas falsas. Después de veinte años, el nieto anuncia su regreso, pero el barco se hunde y como Balboa ve que su esposa está ilusionada por el regreso de él, le piden que acuda a la institución y Mauricio, junto con él, planean la misión.
Para mí, la motivación de Balboa es el amor que le tiene a su esposa y la ilusión que ella tiene de que su nieto se ha reformado, cuando se hace evidente que no es así. Por ello se ve obligado a mentirle y cuando teme que la verdad se revele, recurre a Mauricio que acepta darle una alegría a la señora pues sabe que así podrá tener felicidad en sus últimos años.
El día del supuesto regreso, Mauricio e Isabel hacen todo lo posible para darle un poco de felicidad a la abuela, aunque son evidentes sus fallos en cuanto a geografía, arquitectura y la excelente memoria de la señora, así que Mauricio se ve obligado a hacer otra treta para hacerle creer a la abuela que él e Isabel regresarán a Canadá. El mismo día que Mauricio planea el supuesto viaje de regreso, regresa el verdadero nieto (cuyo verdadero nombre es Mauricio pero que en la obra es conocido como el Otro), que desea dinero para pagar deudas de juego a cambio de no revelar la verdad. Balboa y Mauricio lo enfrentan pero fracasan y Mauricio se ve obligado a reconocer su fracaso, pero la propia Isabel le recuerda que ellos están allí para feliz a una mujer en sus últimos años y que no debe rendirse, precisamente las cosas que él le enseñó.
Isabel decide confrontar al verdadero nieto y le recuerda que revelarle la verdad a la abuela le podría causar un enorme daño y le acusa de no tener escrúpulos al no importarle dejar a una pareja de ancianos sin casa. El nieto se sorprende de que una mujer ajena a la familia le importe la abuela pero no se muestra aludido por las advertencias de Isabel, pero justo cuando va a ver a su abuela, esta aparece de manera repentina: ella ya sabe que su esposo le mintió, sin embargo le perdona porque sabe que lo hizo de buena fe. Por fin la abuela y su nieto están juntos, aunque es evidente que no es una reunión apacible. Después de ver que su nieto no sólo es una persona desalmada sino que sólo le importa salir de un grave problema para seguir en su cuestionable vida, la abuela lo echa de la casa, tal vez para siempre.
Cuando la abuela se reúne con Balboa, le dice que a pesar de todo también logró traer felicidad: ha ayudado a Mauricio y a Isabel a darse cuenta que ambos se han enamorado y al final le propone que ambos se vayan de viaje, a lo que ellos aceptan; de esta manera sigue adelante a pesar del dolor de la revelación. Como ella misma lo dice: estoy muerta por dentro pero sigo de pie, como un árbol. De ahí, el título de la obra.
El tema principal es la felicidad. Para Mauricio, su misión consiste en llevar felicidad, según él, como cura para el alma de personas que realmente necesitan un poco de paz en sus vidas. Es esa su misión cuando evita que Isabel se suicide y se interesa por el caso del señor Balboa y de su esposa. Sin embargo, Mauricio no es perfecto, sino humano cuando habla sobre sus fracasos en su misión y cuando está a punto de rendirse ante la llegada del verdadero nieto, pero es Isabel la que lo convence de que todas sus palabras tienen sentido y han tenido un efecto verdadero en las personas, sobre todo en ella. Al final se da cuenta de que ama a Isabel y que ella le corresponde.
Isabel, por su parte, es un personaje interesante debido a su evolución, pasando de una joven que intenta quitarse la vida y que no soporta las mentiras a una persona segura de sí misma y empeñada en seguir con su misión: dar felicidad. Al principio no está de acuerdo con la idea de Mauricio y del señor Balboa de mentirle a la abuela aunque está dispuesta a seguir con la treta, pero para el tercer acto vemos que toda la ayuda que le dio Mauricio rindió sus frutos cuando se enfrenta al verdadero nieto porque se da cuenta que la abuela merecer pasar sus últimos años en paz y felicidad y le da aliento a Mauricio cuando está a punto de darse por vencido.
El señor Balboa es alguien que le importa mucho su esposa al punto que al ver la enorme tristeza que esta sufre a causa de la expulsión del nieto, le miente escribiéndole cartas sobre que había estudiado y contraído matrimonio cuando las cosas eran muy diferentes. Cuando se entera de que supuestamente su nieto había muerto, se ve obligado a recurrir a la organización de Mauricio para que la verdad no se descubra. Esto muestra que el señor Balboa prefiere seguir con la mentira a decir la verdad. Al final, se ve obligado a decirle la verdad pero ella lo perdona porque sabe que lo hizo por el bien de ella.
La abuela también es un personaje sorpresivo pues uno pensaría que es una anciana frágil y débil de carácter, como al principio lo describe Balboa. Realmente demuestra tener una voluntad y una firmeza en el tercer acto como si nunca la hubiera tenido cuando se encuentra después de veinte años con su verdadero nieto y ve como es él en realidad. En cierta forma, se podría decir que abrió los ojos sobre su nieto, pero también es porque ve que es mejor ser feliz con el recuerdo de un muchacho que se hizo pasar por su nieto sólo para darle un poco de felicidad a su vida a tener que seguir viendo la cruda realidad sobre su verdadera parentela. Aunque esté triste por dentro, intenta todo lo posible para seguir con su vida e incluso decide seguir con la mentira sólo para que Mauricio e Isabel también sean felices.
El nieto es frío, no posee moral alguna ni ningún corazón. No le importa vender una casa y dejar a sus abuelos sin techo, sólo para pagar sus deudas como tampoco manipular y extorsionar para evitar exponer la verdad sobre él. Cree que puede manipular emocionalmente a su abuela para ella acceda a sus deseos, pero la anciana puede ver finalmente sus malas acciones y lo echa no sólo de la casa sino también de su vida.
Para mí, este libro me dejo completamente sorprendida. Lo encontré no sólo interesante sino también precioso en cuanto a los sacrificios, el verdadero interés y genuina solidaridad para ayudar a los que necesitan un poco de paz en la vida. Si bien este es un libro que se basa mucho en la frase “el fin justifica los medios”, se puede decir que esta se empleó en un sentido positivo y no me molesta decirlo.

Comentarios

Entradas populares de este blog

TIERRA DE JAUJA