EL ROL PATERNO DE LA VIDA ES SUEÑO

Hoy voy a hablar de La vida es sueño del escritor español Pedro Calderón de la Barca, aunque no propiamente del libro. La razón se debe a que esta obra de teatro tiene mucha complejidad y riqueza como para tratarla en este mes, el Mes del Padre. Sin embargo, haré algo similar a lo que hice con Doña Bárbara el año pasado, así que en esta entrada más bien voy a tratar sobre dos personajes y su rol como padres en la obra. Precisamente, me refiero a Basilio, rey de Polonia y Clotaldo, el custodio de Segismundo.

BASILIO

Como ya mencioné anteriormente, en la obra Basilio es el rey de Polonia. Es un hombre muy educado cuyas áreas preferidas son las matemáticas y la astrología. Sin embargo, saber administrar un reino no es una de sus cualidades, pues a medida que avanza la obra nos damos cuenta de que Basilio no está bien capacitado en lo que respecta a manejar y gobernar su país.

Aparte de su casi nulo conocimiento del reino, Basilio también tiene un gran defecto, que determina su vida y la de su descendencia: la superstición. Cuando su esposa Clorilene muere tras el parto en el que nace su único hijo Segismundo, Basilio consulta a los adivinos, los cuales predicen que Segismundo será un rey cruel y tirano. Aterrado y creyendo firmemente en la profecía, Basilio encierra a Segismundo en una torre aislada, dejándolo al cuidado de Clotaldo. Para seguir ocultando la verdad, Basilio hace anunciar que Segismundo no sobrevivió al parto.

Con Segismundo fuera del ojo público y sin deseos de volver a contraer matrimonio, Basilio adopta a dos sobrinos suyos, hijos de sus hermanas: Estrella, y Astolfo, duque de Moscovia¹. Aunque Estrella es hija de la hermana mayor y por ello debería ser la que más opción tiene al trono de Polonia, Basilio decide que sea Astolfo el heredero por el hecho de ser varón. Para que no haya pleitos entre los primos a su muerte, Basilio decide que los dos contraigan matrimonio para que reinen de manera conjunta y así ambos sean considerados sus sucesores². Una vez más esto hace resaltar su falta de conocimiento del reino, pues sus súbditos se niegan a aceptar a un extranjero como el futuro rey de Polonia.

Sin embargo, Clotaldo, que llega a visitar a Basilio, le recuerda la existencia de Segismundo. Ante esto, Basilio decide considerar a su hijo como heredero si este muestra cortesía y sentido común cuando se llevado al castillo por primera vez en su vida. Sin embargo, para realizar esto Basilio hace drogar a Segismundo para que crea que todo es producto de un sueño. Al ver la actitud violenta de Segismundo, de inmediato lo hace regresar a la torre.

Como la existencia de Segismundo termina por saberse entre el pueblo, este se alía a su favor y por supuesto en contra de Basilio y Astolfo. Cuando las fuerzas de Segismundo derrotan a las de Basilio, este está dispuesto a aceptar la muerte con dignidad pero en su lugar Segismundo le perdona la vida y todo lo que le ha hecho durante toda su vida. Al ver que su hijo es todo lo contrario de lo que los adivinos predijeron siendo en realidad un hombre que ha decidido construir su propio destino, Basilio le cede el trono de Polonia.

En mi opinión, Basilio cree que intenta salvar su trono y a si mismo ocultando la verdad y creyendo lo que otros le dicen. Es un hombre que cree en la predestinación, es decir, que la vida y el destino de los seres humanos están determinados. Esta actitud le sale muy cara cuando el pueblo se pone en su contra pero su hijo Segismundo no sólo no resulta ser el hombre tiránico que muchos predijeron que sería sino que perdona a su padre por el daño que le hizo. Finalmente Basilio comprende que el destino no está escrito sino que es la persona la que lo escribe.

CLOTALDO

Clotaldo es el guardián de la torre en la que Segismundo ha estado confinado desde su nacimiento. A pesar de su condición, en realidad ha sido más una figura paterna y un tutor para Segismundo que su carcelero y a su vez, este lo ve como a un padre.

Lo que Clotaldo no sabía en su momento pero luego se enteraría es que ya era padre de una hija: Rosaura, una joven de Moscovia, con cuya madre tuvo una relación y que posteriormente abandonó antes de que se enterara de su embarazo. Ella decide buscar a su padre en Polonia puesto que su madre le dijo que pertenecía a ese país, pero también al hombre que ama. Para esto, se disfraza de hombre y se lleva una espada que perteneció a su padre. Casualmente, padre e hija, es decir, Clotaldo y Rosaura se encuentran por primera vez en la torre donde él vive junto a Segismundo. Al ver la espada que porta Rosaura, enseguida la reconoce como suya y se da cuenta que el joven es su hijo, no dándose cuenta aún que es una mujer. Clotaldo decide llevar tanto a Rosaura como a Segismundo a la corte de Basilio pues así lo decidió este.

Clotaldo es testigo y víctima del comportamiento errático y violento de Segismundo pues termina siendo lastimado justo cuando iba a proteger a Rosaura de Segismundo en el momento en que ella se identificó como mujer y este intenta forzarla. Al ver el desastre, Clotaldo se ve obligado a acatar la orden del rey Basilio de devolverlo a la torre.

Cuando ocurre la rebelión, Clotaldo se debate entre ser leal a su rey o seguir a Segismundo y a Rosaura. Esto es porque además de la lealtad que siente por Basilio a pesar de sus errores, Clotaldo también ha aprendido a querer a Segismundo e incluso empieza a sentir amor de padre por su hasta entonces desconocida hija. Al final decide seguir apoyando a Basilio, a pesar de que teme que Segismundo le mate por ello. Contra lo que esperaba, Segismundo le permite reunirse con Basilio poco antes de que sus partidarios venzan a los de Basilio. No sólo perdona a Clotaldo por apoyar los errores de su padre sino que declara noble a su hija Rosaura. De esta forma, no sólo Clotaldo tiene una heredera sino que también Rosaura se puede casar con el hombre que ama.

A diferencia de Basilio, Clotaldo tiene capacidad para amar no sólo a su descendencia biológica sino también a aquella que no lo es pero a la que ha aprendido a amar con la convivencia. Está dispuesto a proteger a los suyos, arriesgar su vida si debe hacerlo y no los usa para su conveniencia personal. Sin embargo, Clotaldo también se mantiene fiel ante sus superiores aun cuando estos no tengan razón porque sabe que tarde o temprano estos se doblegaran ante la verdad. Esto indica que cree más en el libre albedrio, contrastando con Basilio.

Los padres en La vida es sueño no son los personajes más importantes de la obra pero son los que les dan la influencia a su descendencia ya sea que crean en la predestinación o en el libre albedrio. Al final vemos que triunfa el libre albedrio en el que cree Clotaldo pues al final Segismundo y Rosaura son los dueños de las decisiones que acaban por cambiar el curso de la obra.

NOTAS

¹ Nombre antiguo para Moscú cuando era conocido como Gran Principado de Moscú, que también era llamado Gran Ducado. Por eso, a Astolfo es llamado duque de Moscovia, en lugar de Príncipe.

² A pesar de sus intenciones, Basilio en realidad está violando las normas de sucesión (en este caso semi-sálica), que en caso de que un monarca no tenga hijos, hermanos varones ni descendientes de estos, herede el hijo de la hermana mayor o la hija, si ella tampoco tiene hijos varones. Por lo tanto, Estrella vendría siendo la heredera por sobre Astolfo, que es hijo de la hermana menor.