MUERTE DE UN VIAJANTE


Para continuar con el Mes del Padre pasamos de Noruega a la costa este de los Estados Unidos, de finales del siglo XIX a finales de la década de 1940. De hecho el padre que es protagonista en la obra de hoy es similar a uno de los personajes de El pato salvaje pero en un sentido distinto. Mientras el padre de El pato salvaje es un hombre deshonesto, infiel y desleal el que analizaré a continuación vive en un mundo “real” que ha creado a raíz de su filosofía de vida y su deseo de evadir la realidad. Ese es William “Willy” Loman, protagonista de Muerte de un viajante, una obra de teatro escrita por Arthur Miller.
Antes de centrarme en Willy Loman, lo haré en el aspecto estructural de la obra. Muerte de un viajante tiene dos actos y un pequeño epílogo llamado Réquiem, en donde finaliza la trama y muestra los caminos que tomarán los personajes tras los eventos del final del segundo acto.
Willy Loman es un vendedor viajante de sesenta años que está casado desde hace varios años con Linda, con la que tuvo dos hijos: Biff y Harold “Happy”, ambos treintañeros. Willy tiene la creencia de que si un hombre gusta a los demás tendrá éxito, dejando de lado aspectos como el trabajo duro y la constancia e incluso le ha inculcado esta filosofía a Biff y a Happy; sin embargo no se da cuenta (o más bien no quiere aceptar) que en realidad esto no lo ha llevado a ninguna parte, es decir, no le funciona. No es un trabajador importante en su empresa y le es infiel a su esposa con una mujer que vive en Boston y a la que siempre le regala medias nuevas; en contraste, Linda debe zurcir las suyas porque no tiene para comprar unas nuevas. Tampoco tiene una buena relación con sus hijos pues de alentar a Biff para que fuera a la universidad y se convirtiera en una estrella del fútbol americano pasó a criticarlo por no encontrar el rumbo en su vida y de manera indirecta contribuyó a que su hijo Happy viviera a la sombra de su hermano mayor.
A pesar del desastre que es su vida, Willy vive engañado y pensando (o más bien alucinando) en su difunto hermano Ben, que se fue a África en busca de fortuna y logró encontrarla. Para Willy, Ben era el modelo del hombre exitoso hecho a sí mismo sin darse cuenta que todo lo que su hermano obtuvo se debió a su trabajo duro y no porque le agradaba a todas las personas con las que se cruzaban. Ben aparece cuando Willy se siente frustrado con su realidad y con sus sueños no realizados, simbolizando precisamente eso.
Otro hombre que también representa un contraste con Willy es su amigo Charley. Como Ben, Charley representa al hombre exitoso pero a diferencia de Ben, lo ha hecho de forma más práctica. No sólo ha triunfado en su empresa sino también en su paternidad pues su hijo Bernard, que fue compañero de estudio de Biff, se convirtió en un abogado defensor prestigioso que para ese momento iba a presentar su primer caso ante la Corte Suprema de Estados Unidos1. Charley está satisfecho con lo que ha logrado en el sentido económico y emocional.
Un aspecto de Charley que es a pesar de no estar de acuerdo con la forma de pensar de Willy la respeta y tiene deseos de ayudarle siempre que puede llegando incluso a ofrecerle trabajo en su empresa, algo que Willy rechaza de manera tajante. La pregunta es la siguiente: si Charley es generoso en prestarle dinero e incluso ofrecerle trabajo, ¿por qué Willy rechaza esa última oferta?
Las razones son su orgullo y su incapacidad de aceptar que su pensamiento es erróneo. Para él, aceptar la oferta de trabajo de Charley sería darle la razón a este último, algo que Willy no está dispuesto a permitir.
Hablaré un poco de los hijos Willy, Biff y Happy. Biff, el mayor, tiene treinta y cuatro años en el tiempo presente de la obra. Cuando estaba por terminar high school2 era un prometedor jugador de fútbol americano al que tres universidades le ofrecieron becas atléticas. De esas tres universidades, Biff soñaba con entrar en la Universidad de Virginia. Para esa época, él tenía una imagen elevada de su padre y tenía su mismo pensamiento: si gustas a los demás tendrás las puertas abiertas a todo.
Sin embargo, todo eso cambia cuando Biff pierde matemáticas (a pesar de la oferta de ayuda que le hizo Bernard) y se le ofrece un curso de verano3 para que la apruebe como es debido. Biff no considera ese camino y quiere que su padre use su “carisma” con el profesor para que este le dé las decimas que necesita para aprobar la materia. Un incidente que ocurre en Boston cuando Biff va a visitar a Willy para pedirle ayuda cambia el curso de su vida para siempre. Desiste de asistir a la universidad y es incapaz de mantener un empleo porque siempre acaba por robar a sus patrones (algo que a su padre no le importa) e incluso fue por ello a la cárcel. La relación con su padre también cambia al punto de considerar que su forma de pensar ha definido el destino de toda la familia y no cesa de echárselo en cara. Para desgracia de Biff, su padre es de esas personas que sólo oyen lo quieren oír pero no lo que deben oír. Al final se da cuenta que su padre no es un hombre importante sino una persona común y corriente, lo que lo ayuda a decidir buscar su propio destino.
Por el contrario, Happy, el hijo menor de Willy, ha buscado desde niño la aprobación que su padre nunca le dio de joven al estar más pendiente del futuro de Biff, lo que se ve en las análepsis4 cada vez que le decía a su padre “Estoy adelgazando”. Todo eso hizo que Happy viviera a la sombra de su hermano mayor durante mucho tiempo y cuando este último acaba “decepcionando” a su padre es él el que termina por adoptar el modo de pensar de Willy, es decir, desea seguir sus pasos. Happy es un ejemplo de nombre irónico, puesto que él es cualquier cosa menos feliz.
Muerte de un viajante es más que una obra sobre las relaciones entre padres e hijos; también es una crítica oscura del llamado sueño americano. Analicemos a Willy Loman. Para él, si una persona agrada a todos tendrá éxito en la vida y eso se lo ha inculcado a sus hijos. La realidad es otra: ningún otro vendedor viajante lo recuerda, es despedido de la empresa porque produce más pérdidas que ganancias y a estas alturas lo único que puede hacer es pedir prestado dinero a Charley, que se podría considerar como un verdadero amigo al ser el único personaje en toda la obra que se preocupa por él. Willy, por el contrario, no se toma bien los intentos de Charley por aconsejarle y ayudarle y cree que lo que dice no va con él, prefiriendo seguir con su fantasía. En resumen, el sueño que ha creado Willy es completamente falso.
No es difícil decir que esta obra me encantó y también me gustaron mucho sus personajes, con los cuales todos nos podemos identificar: el hombre que cree que sus ideales son perfectos cuando no los son, la esposa que lo apoya incondicionalmente y que sufre por las acciones de él pero que al igual que su esposo no acepta que él se haya equivocado, el hijo que busca llamar la atención de su padre, el hijo que no quiere seguir los pasos de su padre… Todos ellos no son sólo seres de papel, también son seres muy humanos y con cierto toque realista que no podemos evadir.
Para mí esta es una obra de mucho análisis y muchos temas cómo las relaciones familiares, el deseo de progresar y la frustración cuando ello no se obtiene y la lucha entre la fantasía y la dura realidad. Definitivamente la recomiendo.
NOTAS
1 La máxima institución judicial en Estados Unidos. Cuando son elegidos, sirven de por vida y pueden ser destituidos, pero también renunciar o retirarse si lo desean. Pueden hacer revisiones judiciales, declarar inconstitucionales leyes federales y/o estatales o actos federales y/o estatales que vengan del poder ejecutivo (alcaldes, gobernadores, Presidente de los Estados Unidos) y sentar precedentes que obliga a otras cortes a respetarlas.
2 Véase nota 2 en La lección de August.
3 También llamada recuperación de verano, son programas escolares entre junio y agosto que se le ofrecen a estudiantes con bajas calificaciones en una materia determinada para que puedan aprobarla antes de entrar a un nuevo año escolar o a una universidad. Igualmente ofrecen actividades extracurriculares para estudiantes que quieren realizar algún curso durante el verano.
4 También llamada flashback, son escenas o pasajes en las que se retrocede a una escena que ocurrió en el pasado. Un ejemplo del uso de análepsis es Frankenstein o el moderno Prometeo.

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